El director de juego es mi pastor, nada me falta.
En partidas de intriga palaciega me hace rolear,
me conduce junto a bestias terribles
y reostia mis huesos.
Me guía por el camino justo,
haciendo honor a su Nombre.
Aunque pase por un valle tenebroso,
de ningún mal librare,
porque Tú estás conmigo.
Tu pantalla y tu modulo me dan inseguridad.
Me preparas un banquete
en frente de mis enemigos,
lias con argucias mi cabeza
y mi copa rebosa.
Tu rune y tu gloranza me acompañan
todos los findes de mi vida;
y habitaré en la casa de PP
por sabados sin término.
sábado, 14 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¡Amén!
ResponderEliminar