Aquí dejo 10 consejos para que todo aspirante a culito tierno sea un miembro digno y de pleno derecho. Los más talibanes de esto estarán pensando “Tú que dices, maldito xboxer, tu nunca has sido un culito tierno”. Perdón. Yo ya jugaba con Jan al Counter Strike en un clan antes de que vosotros le conociérais siquiera. Pobres mortales. Así que tengo el espíritu bien mamado, y me permito el lujo de ofrecer impagables consejos. Limitaos a agradecerlos.
El decálogo de los culitos tiernos
1.- Insulta a tus enemigos. El caos y la desmoralización en la facción rival
2.-Insulta a tus aliados. Sí. Mantener
3.-Pon nombre a tu fusil. Qué soldado que se precie no lo hace. Y no hablamos en este caso de las mariconadas que se ven en las películas yankis. Nada de nombres de mujer. Mi escopeta de cañón recortado calibre .12 gauge no se va a llamar Marlene. No. Se va a llamar “Ojos negros” “Ojos de perro” o “Labios calientes”. Las granadas de espinas se van a llamar “Pinchacondones”. La pistola será “El té humeante”. El fusil de cerrojo “El estruendos”. El lanzagranadas “El cascanueces”. La ametralladora calibre .40 es la entrañable y adorada “Esperrigochadora” Etc.
4.- Sadismo. Cuando un enemigo cae muerto, especialmente si por nuestra pantalla desfila su pulpa chicharrinosa (los sesos se le han desparramado contra una pared, hay un enjambre de vísceras en el suelo, un brazo mutilado ha salido volando,… ) hay que reirse a estentoreas carcajadas. Es lo más gracioso que hemos visto en nuestra jodida vida. Otra técnica de Jan es, cuando a un cadáver se le mueve algún miembro, levantarse con ojos desorbitados y decir a voz en grito “CAGON DIOOOSS… ¿Has visto eso? ¡Tiene jodidos espasmos post-mortem!”
5.-Seña de identidad. Debe haber algo en tu modo de combatir que te distinga de los demás. Un detalle de asalto, una táctica. Por ejemplo, rondar por los bordes del mapa a la busca de francotiradores para matarlos de un culatazo en la nuca al grito de “Hijo de perra”. Seguir acribillando al cadáver de un enemigo que nos ha resultado particularmente insidioso, para luego recargar y decir “quédate con el cambio”. O, la mía propia favorita, de vez en cuando tirar granadas sin ton ni son por encima de algún muro/tejado.
6.- Admira el paisaje. El esfuerzo de los desarrolladores por simular un entorno chachi es algo que los culitos tiernos saben agradecer. De nuevo, cito al maestro de maestros, Jan: “Cagon dios maifren, fíjate, se ven los agujeros de las balas”
7.-
8.- Absoluta falta de paciencia ante fallos técnicos. El wifi ha perdido señal. Se ha caído la red. Se ha ido la luz. No importa el motivo. Tenía la cabeza de alguien en el centro del punto de mira y el dedo presto a pulsar R2. Hay que poner el grito en el cielo. “Me cagon
9.- Acoso y derribo a los miembros del sexo opuesto. Mándale una foto tuya a la tia más buena (o con la piñata más desmesurada) del clan, recién salido de la ducha, cabello mojado, tez psicótica, pistola de juguete en ristre y sabrás de qué hablo.
10.- Y por último y lo más importante: Jan es tu nuevo Dios. Camina junto a Jan. Aprende de Jan. Sé Jan. Supera a Jan.